El humor negro de Medievil

Todos recordamos como en el año 1994, una compañía "novata" o más bien debutante, entró al mercado de las consolas. Se trataba de Sony y con su PlayStation cautivó a millones de jugadores de todo el mundo. Fue la primera batalla disputada verdaderamente entre diversas compañías y a base de esfuerzo se ganó un hueco bastante grande en el mercado, consiguiendo ser la consola más vendida de su generación. Debido a esto, disfrutó de titulos de todo tipo, aptos para todo tipo de público. Sin embargo, no fue hasta cuatro años después del lanzamiento de la consola -estando ésta en su máximo apogeo- cuando Medievil ve la luz.

Medievil fue presentado como un juego bastante macabro en el que manejabas el cadáver del capitán de la guardia real encargado de eliminar al malvado mago Zarok. Sin embargo, en mitad de la pelea Sir Daniel (nuestro protagonista) es derrotado. Cinco años después, Zarok recupera su poder e invoca a todas las criaturas demoníacas, además de resucitar los cadaveres de los soldados de la guardia real, despertando a Sir Daniel.

Así comenzaba nuestra aventura, en la que teníamos que pelear contra centenares de zombies y demás criaturas como gárgolas, demonios... Pero lo que caracterizó al juego fue su grandísimo humor negro que lo dotaba de cierta originalidad y personalidad (tan demandada en esta generación). Sir Daniel era capaz de derrotar a sus enemigos con partes de su cuerpo o superar ciertos obstáculos gracias a éstas. Por eso no era de extrañar ver a nuestro personaje andar sin cabeza o arrancarse un brazo para atacar a nuestros enemigos.

Otro de los puntos por los que destacó Medievil fue la grandísima banda sonora que poseía. Composiciones que otorgaban al título la ambientación que se exigía en cada momento.

Después del éxito de la primera entrega, SCE (la compañia creadora del primer titulo) lanza el segundo titulo de la saga: Medievil 2. Un juego que mantiene la esencia de su predecesor pero que sin duda no destacó tanto como el primero. Quizás por las pocas novedades que presentaba o por el hilo argumental que toma prestado de su primera entrega.

A pesar de todo, los fans del juego quedaron satisfechos y disfrutaron del titulo tanto como el primero. Es por ello, que cuesta entender el largo silencio que sufre la saga desde entonces (a excepción del remake que recibió para PSP, Medievil Resurrection) cayendo definitivamente en el olvido. Un juego que en su día luchó por ganarse un lugar propio en el mercado, juntando ingredientes plataformeros, tintes macabros y un argumento enmarcado dentro de la clásica ambientación rolera (época medieval, con hechiceros, demonios, dragones...). Un juego que a día de hoy cuesta recuperar pero que si se hiciera, daría un soplo de aire fresco al sector actual.